Estos días, repasando pelis en DVD (y algunas en DivX!!) he visto otra vez después de un montón de años Boy meets girl, de Leos Carax. Comparándola con «Mauvais sang» es posible que resulte perdedora, pero hay algunas cosas en esta peli que se ven sólo muy contadamente, te deja la impresión de que se ha filmado a hachazos, tan hermosamente atropellada que le perdonas todos los errores. Y ya no me acordaba de las dos largas secuencias del flipper, la primera cuando unos chavales alucinados observan como el técnico abre la máquina, y sobre todo la del final, cuando Alex comparte el petaco con un cincuentón perdedor. «Boy meets girl» tenía todos los números para envejecer mal, pero le ha pasado todo lo contrario.
También leo que inauguran la editorial Ponent Mon editando en castellano dos autores que he comentado aquí, La espinaca de Yukiko de Boilet y Barrio Lejano de Taniguchi. Eso se llama empezar con buen pie, porque son dos auténticas obras maestras.